En un futuro, medicinas como Prozac, Valium o Vicodin podrían ser remplazadas por un nuevo tipo de medicamento; drogas vivas.
Investigadores del Centro de Farmabiótica Alimentaria en Cork, Irlanda, sugieren que la ingesta moderada de ciertas bacterias podría ayudar a tratar algunas enfermedad mentales como el trastorno de estrés postraumático.
Aunque suene extraña, la idea no es nueva. Los probióticos son microorganismos que, al ser ingeridos, producen ciertos beneficios a la salud.
Las bacterias del ácido láctico (LAB) y las bifidobacterias con probióticos comunes, encontrados en yogures y suplementos alimenticios. Ciertas levaduras y bacilos también son utilizados para tratar enfermedades intestinales.
Los probióticos que afectan la salud mental son llamados psicobióticos. ¿Cómo afectan al cerebro bacterias que habitan el intestino?
Algunas cepas son capaces de modular la inflamación y sanar la función inmunológica, mejorando la disposición psiquiátrica. Otras pueden intervenir en la función de la corteza suprarrenal, responsable de controlar la ansiedad y el estrés.
Existen también algunas bacterias que producen señales psicotrópicas como la dopamina y la serotonina, responsables de los sentimientos de felicidad.
Estudios con ratones apuntan a que ciertos psicobióticos podrían ser efectivos antidepresivos y ansiolíticos. Los científicos pretenden continuar con su investigación y pronto comenzar ensayos clínicos con pacientes. Creen que existen varias bacterias cuyos beneficios psicotrópicos aún desconocemos.
También se descubrió que estos probióticos, o psicobióticos, «secretan altas cantidades de GABA» (ácido gamma-aminobutírico), un aminoácido que actúa como principal neurotransmisor inhibitorio del cerebro.
Naturópata