El sistema inmunitario cada vez se está relacionando más con enfermedades degenerativas y mentales, sabiendo que ejerce un control sobre todas las funciones de nuestro organismo.
Ese control está íntimamente ligado con el sistema nervioso. Quién no ha oído alguna vez: «tuve una mala noticia y me salió un herpes», o, «después de aquella semana de terrorífico estrés me empezaron a salir sarpullidos». Son sólo simples ejemplos que relacionan ambos sistemas.
Naturópata