Porque son más nutritivas que muchas de las verduras que comemos, consumir algas debería ser un hábito en nuestras comidas, tan a menudo como fuera posible.
Índice de contenidos
Consumir algas: beneficios
Son ricas en oligoelementos, vitaminas y proteínas de gran calidad, y poseen un extraordinario poder adelgazante y anticelulítico.
Se pueden consumir frescas o desecadas con previo remojo. Antes casi todas las algas procedían de países orientales (China, Japón,…), pero ahora han empezado a cultivarse con éxito en Europa, América y África.
Consumir algas: Buenas para los diabéticos
El dulce sabor de algunas algas es debido a su contenido en dos azúcares simples, el manitol y la fructosa. Ambos son de gran importancia para los diabéticos, ya que no aumentan el nivel de azúcar en la sangre.
Consumir algas: Completan la dieta de los vegetarianos
Debido a su alto contenido en proteínas de gran calidad y de vitamina B12, La espirulina, por ejemplo, es más rica en proteínas que la carne, el pescado o los huevos. Además tiene una composición de aminoácidos esenciales en proporciones adecuadas, y de fácil asimilación.
Consumir algas: Mejoran la vista
La mayoría de las algas tienen un alto contenido en vitamina A. Las Nori tanta como las zanahorias, y la espirulina hasta 15 veces más. Por eso muchos dietistas recomiendan su consumo para prevenir problemas de visión.
Consumir algas: Beneficiosas contra la hipertensión
Su equilibrio mineral le convierte en un regulador del sistema cardiovascular que ayudan a combatir la hipertensión arterial, enfermedad que es menos frecuente en las zonas donde se consumen algas.
Consumir algas: Facilitan la digestión y regulan el tránsito intestinal
A menudo se añaden a la cocción de las legumbres debido al ácido glutámico que contienen, que tiene la capacidad de reblandecer las fibras de otros alimentos; o se sirven en combinación con fritos para hacer más fácil la digestión ya que sus mucílagos protegen la mucosa gástrica y facilitan el tránsito de los alimentos a través del intestino.
Consumir algas: Depuran el intestino
Por otro lado, el ácido algénico que contienen, debido a su naturaleza indigerible, actúa como un limpiador natural de los intestinos, ya que reúne las toxinas en la pared del colon y permite su eliminación de forma natural.
Una receta tradicional japonesa, el shio-kombu, se ha utilizado durante siglos como remedio para las colitis (inflamación del intestino colon). Se prepara remojando el kombu, cortándolo en pequeños cuadrados y cociéndolo con salsa de soja y agua hasta que se ablande o haya desaparecido el líquido.
Consumir algas: Ayudan a cubrir las necesidades diarias de hierro
La espirulina, en particular, contiene más que cualquier otro alimento: seis veces más que los cereales completos y diez más que las espinacas. Por eso se suelen recomendar en el tratamiento de las anemias y en casos de debilidad general.
Consumir algas: Disminuyen el colesterol
Las algas no solo presentan un 5% de grasas insaturadas esenciales para el organismo, que disminuyen el nivel de colesterol malo, sino que además, están desprovistas de grasas saturadas (las que lo aumentan). Su alto contenido en fibra también facilita su disminución.
Consumir algas: Conservan la piel joven y el cabello sano
Aunque resulte sorprendente, muchas algas contienen más vitamina E que el germen de trigo. Una vitamina con acción antioxidante, conocida popularmente como la vitamina de la longevidad y la belleza.
Otras, por su contenido en zinc, resultan eficaces contra el acné. Por otro lado, su equilibrio en minerales y oligoelementos equilibra el nivel de sangre en el organismo y dan elasticidad y brillo al cabello.
Consumir algas: Van bien para los dientes y los huesos
100 g de Iziki seco contienen 1.400 mg de calcio, unas 15 veces más que la leche. La espirulina y la wakame también son especialmente ricas en este mineral. Por eso van bien para mantener la salud de los dientes y los huesos.
Consumir algas: Templan los nervios
Porque destacan por su riqueza en vitaminas del grupo B (especialmente B6) que difícilmente pueden encontrarse en otras fuentes vegetales.
Consumir algas: Neutralizan los efectos de la contaminación
Gracias al ácido algínico que contienen, capaz de combatir las toxinas neutralizando la actividad de los metales contaminados, radiactivos y tóxicos de nuestro organismo.
Consumir algas: Reducen el estrés
El alga dulce es muy rica en potasio y magnesio, por eso está recomendada para luchar contra el estrés. Asimismo, la riqueza en vitaminas del grupo B de todas las algas, hace que sean muy útiles en casos de nerviosismo, estrés, depresiones, ciática, lumbago, etcétera.
Consumir algas: Facilitan el bronceado
Por su alto contenido en carotenos o provitamina A, que favorecen la producción de melanina y mantienen la piel sana.
Consumir algas: Ayudan a adelgazar
Porque son saciantes, ligeramente laxantes y aceleran la combustión de las grasas. Por su riqueza en yodo y la importancia que éste tiene en el control del metabolismo humano, y por su bajo contenido en calorías y elevado nivel nutritivo, que las hacen el complemento ideal en las dietas de adelgazamiento.
Consumir algas: Estimulan el crecimiento
Según algunos autores, la Chlorella presenta en su composición un factor estimulante del crecimiento CGF (Chlorella growth Factor), que favorece el desarrollo de los niños y adolescentes.
¿Cómo comerlas?
Chlorella
Es la fuente natural con mayor clorofila, especialmente rica en vitaminas, minerales y proteínas, y en el llamado «factor de crecimiento». Se toman de 5 a 10 comprimidos al día con agua.
Espirulina
Una de las fuentes naturales más ricas en proteínas y vitamina B12 descubiertas hasta el momento. Se toman de 2 a 4 comprimidos antes de las comidas.
Fucus
Destaca especialmente por su alto contenido en yodo (30.000 mcg/100 g). Se toman de 1 a 2 comprimidos al día con abundante agua, antes de las comidas.
Kelp
Es un preparado dietético compuesto por una mezcla estandarizada de algas desecadas en polvo. Destaca por su alta concentración en minerales y vitaminas.
Agar-Agar
Es muy rica en fibra y minerales, se presenta en tiras desecadas que, previo remojo, se utiliza en ensaladas.
Su efecto aglutinador es diez veces superior al de la gelatina animal es ideal para preparar yogurt, gelatina, flanes, mermeladas, helados, arroz con leche, pates, etc.
Nori
Se encuentra en láminas desecadas. Es muy rica en vitamina A. Se tuesta y se pone desmenuzada sobre arroces, pastas, sopas y ensaladas. Además de utilizarse (en láminas) para los Sushis.
Wakame
Tiene muchas vitaminas del grupo B y suele hervirse junto con los cereales y las legumbres.
Naturópata